El capitán limpio

Los padres de José, Ana y Joaquín, no saben que su hijo es un súper héroe, piensan que el niño solo juega con el traje que compraron la última vez que celebraron su cumpleaños, así comienza la aventura del Capitán Limpio. Los ejércitos apestosos están por todos lados. El Capitán Limpio, está sorprendido por la invasión de los mutantes. En las calles se acumulan montañas de basura. El mal olor y los gases atraen a Bacterión, Hóngoros y Acarión, los pequeños mutantes están de regreso y sus ejércitos se multiplican por toda la ciudad.

Por la noche cae una lluvia inusual en esta ciudad construida en medio del desierto. El agua forma grandes charcos de barro, la gente camina con dificultad. El Capitán Limpio puede ver como los ejércitos de la suciedad trepan a los zapatos de la gente. Los lentes Cuánticos del Capitán Limpio le permiten ver lo que a simple vista es imposible de percibir. Entonces... – Dijo el Capitán Limpio – Oh, samplinas y samplinolas ¿qué podré hacer ahora? Tengo que terminar con los mutantes, ¡voy a limpiar la ciudad!
Al día siguiente el Capitán Limpio sale al valle con su perro Cantilón y encuentra a su amigo Yakuri. Hola amigo estoy aquí porque la ciudad necesita de nuestra ayuda. Sí Capitán, la basura se está acumulando en la ciudad y los camiones recolectores no pueden con todo. Es necesario buscar a Tractor para que nos ayude con la limpieza. Vamos, él está cerca a la estación de buses en el depósito municipal, Tractor se pondrá muy contento al vernos llegar.

Cantilón, nos ayudará con su súper olfato a encontrar a los ejércitos apestosos, suelta tu capa y a volar. Mientras vuelan Yakuri piensa en los pestilentes mutantes, ¿Cómo lograron regresar del desierto?, ¿Quién los liberó de la grieta del silencio?.

Capitán Limpio, los mutantes han crecido demasiado y deben pensar que hemos abandonado la ciudad, se llevarán una gran sorpresa cuando nos vean en acción. Si Yakuri, pero creo que ya sabían de nuestra presencia, me he dado cuenta que nos están siguiendo, escondidos detrás de las nubes: “oh samplinas y samplinolas ¿qué haremos ahora?”…

Una nube de polvo les tapa la visión, es un momento de turbulencia,… los mutantes les arrojan bolsas con desechos orgánicos, fue algo muy apestoso, la guerra está declarada. Entonces, el Capitán Limpio se detiene y los enfrenta: ¡Soy el Capitán Limpio! , la voz del héroe suena como un trueno. Lo sabemos – responde Bacterión – y ahora tú prepárate para ser derrotado. ¡Eso lo veremos Bacterión, ya perdiste antes, también perderás ahora!
Yakuri arroja potentes chorros de agua y precipita a Tierra a muchas bacterias. Un poco más abajo el Capitán Limpio sopla con toda su fuerza, y evita que las bacterias caigan sobre la gente que huye del lugar. El Capitán con su capa atrapa las bolsas de basura y las lleva fuera de la ciudad hacia el relleno sanitario.

Yakuri mantiene a las bacterias alejadas del lugar, tiene mucho cuidado con ellas porque Bacterión, Hóngoros y Acarión, han mutado al tamaño de una persona y son muy fuertes cuando atacan. El perro Cantilón está muy atento a lo que dice el Capitán Limpio.

Vamos a encontrar a Tractor, es de mucha utilidad para limpiar la ciudad. El robot Tractor puede transformarse en un cargador frontal, un camión compactador y hasta puede volar como un avión de carga y mucho más.

Los amigos continúan su viaje, hasta que por fin llegan al depósito de la estación de buses del metropolitano. El robot Tractor sale al encuentro de sus amigos. Bienvenidos amigos los estoy esperando. Hola Tractor, la ciudad necesita de nosotros. Sí, Capitán limpio - tenemos que activar nuestros poderes, los símbolos de los tres reinos del universo.“¡Oh, samplinas y samplinolas!” Capitán Limpio, que todo sea como antes, ya estoy un poco aburrido aquí en el depósito municipal, me están creciendo hojas y eso no da mucho prestigio a un robot. Así es Tractor, ahora debes entrar en acción, tú vas a representar al reino mineral, tu símbolo es la cornucopia de oro. Y tú amigo Yakuri, vas a representar al reino vegetal porque ellos dependen de ti para vivir, sin agua no hay vida, tu símbolo es el árbol de la Quina. Yo voy a representar al reino animal y mi símbolo es la vicuña, juntos limpiaremos la ciudad hay que planificar lo que haremos desde la noche hasta el amanecer -dijo el Capitán Limpio -.

Y así fue, terminado el plan, los amigos y el perro Cantilón fueron por las calles de la ciudad. El Capitán Limpio levanta los contenedores y deposita la basura  en la tolva de Tractor. Los amigos llevan toda la basura al relleno sanitario. Yakuri, termina de limpiar las pistas y veredas con potentes chorros de agua que se van por los desagües, todos hacen su mayor esfuerzo para que el centro de la ciudad amanezca limpia. Aparentemente todo se desarrolla con calma, pero a lo lejos los ejércitos de la suciedad están observando su derrota momentánea.
Pero esto no se va a quedar así - dijo Acarión - , hagamos planes para deshacernos del Capitán Limpio y sus amigos, porque es la única manera de que en la ciudad reine la suciedad y el caos. Hóngoros, añade: la gente camina por las calles, los autos y los buses circulan con normalidad, se puede respirar mejor, la ciudad está limpia otra vez, ¡esto tiene que cambiar está en juego nuestra existencia!

El Capitán Limpio al llegar a su casa se quita el traje de héroe y lo guarda con mucho cuidado en su armario. Luego, lleva a su perro Cantilón a su casita de madera y se despide de su fiel mascota moviendo las manos. “Oh samplinas y samplinolas"  - dijo José –  ¿Quién cómo Yakuri y Tractor?, ya están descansando. Yo, apenas he dormido tres horas y tengo que alistar mis cosas para ir a la escuela. Tac tac tac, ¿José?, ya es hora de levantarse, está listo el desayuno. Gracias mamá, me baño en diez minutos y salgo cambiado con mi uniforme de héroe, perdón quiero decir de escolar… ¿Estás bien hijo, uniforme de héroe?, hoy día no tienes taller de teatro, además tu traje del hombre araña está en el cordel recién lo lavé ayer por la noche y todavía no está seco. No hay problema mamá, dije uniforme escolar y además soy tu héroe ¿verdad? , ¡El mejor hijo del mundo! Claro que sí hijito, eres mi héroe el mejor hijo del mundo, lo digo yo porque es verdad y soy tu madre. Aprisa José, voy a calentar otra vez el desayuno, no demores por favor.
Después del desayuno, de camino a la escuela sus padres comentaron, ¿Qué pasó ahora?, el centro de la ciudad está limpia y ordenada. La ciudad está mejor y todos debemos colaborar con la limpieza en cualquier lugar. En el colegio hacemos campañas de limpieza y además nos enseñan a reciclar los desechos. Ahora estoy haciendo un trabajo con papel reciclado. La conversación está terminando, el padre del pequeño héroe estaciona el auto, José baja y se despide de sus padres.

El héroe camina y se pregunta, ¿Qué hacer para que la gente no ensucie la ciudad? Este problema no solo es responsabilidad de los mutantes, también lo es de las personas que ensucian la ciudad y no les importa el problema de la contaminación. Después del colegio, José va a su casa y hace sus tareas, descansa un poco y luego de unas horas llama por teléfono a sus amigos: Hola, tengo la sospecha de que los mutantes están escondidos en las afueras de la ciudad, en el basurero municipal. Es muy posible que en este momento todas las bacterias, hongos y ácaros hayan mutado y estén tan grandes como nosotros, eso sí que es un peligro. Así que los buscaremos, para echar en sus sucios cuerpos tanta agua y espuma desinfectante para que otra vez regresen a su tamaño natural, de esta manera es más fácil encerrar a cada uno de los mutantes  en lo profundo del basurero municipal. Sí Capitán Limpio, vamos a buscar a los mutantes antes que sea demasiado tarde, si pasa más tiempo será difícil vencerlos.